Generalmente entre los 4 y 12 años, cuando los huesos aún están en desarrollo.
No, la ortodoncia mueve los dientes, mientras que la ortopedia guía el crecimiento de los huesos maxilares.
Se usan aparatos removibles o fijos que estimulan o limitan el crecimiento óseo.
Puede derivar en maloclusiones severas que requieran ortodoncia o cirugía en la adultez.